miércoles, 16 de noviembre de 2011

DCgPA: Nuevos tiempos, las mismas ideas

Diario de campaña general de un padre en apuros: Día 13

El reto ante el que se encontró España ayer no ha tenido parangón hasta ahora. No, no me refiero a lo de remontarle a Costa Rica en los siete últimos minutos, sino a la cuestión económica. Ayer la prima de riesgo marcó máximo histórico y sigue creciendo. La presión de los mercados no se detiene, pero nuestros políticos, a las nuevos desafios responden con las mismas ideas de siempre.

Confianza
La idea fuerza de esta campaña para el, según todas las previsiones, futuro presidente del Gobierno Mariano Rajoy, es la confianza. Su simple advenimiento generará la confianza que calmará a los mercados, aliviará la presión sobre la deuda española, permitirá que fluya el crédito, se reactivará la economía, se reducirá el paro y se solucionarán los problemas de España. Todo parte de que la llegada de Rajoy dará confianza sin que quede claro cómo conseguirá esa confianza. Si Mariano gana y no surge la confianza, toda su teoría se viene abajo. De momento, los mercados no responden favorablemente a que en cinco días vaya a ganar las elecciones.

Foto: Diariovasco.com
La careta de los recortes
El otro tema de la campaña son los recortes. Hasta ahora sólo el PSOE los había planteado acusando a los populares de llevar en su agenda oculta la política de recortes. Ayer, por primera vez, los anunció un dirigente del Partido Popular. Fue María Dolores de Cospedal la que, en su estilo, puso la venda antes de la herida. Advirtió de que cuando los populares hagan lo que tienen que hacer habría muchas manifestaciones en la calle. Es decir, que la solución si no se logra la confianza de generación espontánea es meter la tijera hasta el fondo. Lo intuíamos, pero está bien que lo vayan avisando antes del 20N para que nadie se lleve a engaño. La duda que surge es si el recorte empieza por el sueldo de 12.000 euros de la Cospedal y si ella saldrá a la calle a manifestarse.

Foto: eldiariomontañes.es
Concentración nacional
Otra idea que se plantea como solución a los problemas de confianza en España es la de un gobierno de concentración nacional. Para los neófitos, se trata de un gobierno en el que están todos rebujados. Los dos grandes y los minoritarios que se animen. Entre los minoritarios que se apuntan está CiU cuyo líder, Durán i Lleida es el que plantea la idea. Después de tantos años de diputado, al amigo Josep Antoni le pirra lo de ser ministro. Dos maldades. Supongo que no será de agricultura, porque no me lo imagino visitando el campo andaluz. Curioso, además, que hable de concentración nacional quien considera que España es un estado plurinacional. Sea como fuere y esté o no Duran, lo del gobierno de concentración nacional no es ni mucho menos una idea nueva. Ansón lleva varios años planteándola para liquidar a ZP y poner precisamente a Durán como presidente. Aunque, en realidad, tras la transición, el primero que habló en España de gobierno de concentración nacional fue Armada antes del 23F y ya vimos como acabó aquello.

Acción u omisión
Ayer en Radio Cádiz entrevistaron a Manuel Cárdenas, cabeza de lista de Izquierda Unida al Congreso por Cádiz. La entrevista me cogió en el coche y la pude oír con cierta atención. Me llamó la atención la constante referencia de Cárdenas a la representación de la izquierda, como si tuvieran esa exclusiva. Pero, sobre todo, me llamó la atención cuando Francisco José Román le preguntó a Cárdenas cuál sería la política de pactos "por acción u omisión". La idea del pacto por omisión es kafkiana y, en el ámbito de Izquierda Unida sugiere la obligación de votar siempre a favor del PSOE. Lo curioso fue que el que puso esa idea sobre la mesa fue su líder Cayo Lara en las elecciones autonómicas y municipales de mayo comprometiéndose a algo a lo que no tenían por qué comprometerse y que, además, no fueron capaces de cumplir. Por cierto, Cárdenas salió bien de la pregunta. Dijo que no se planteaba una política de pactos tal y como estaban las encuestas y que, en todo caso, ya el PSOE había escogido CiU y PNV frente a IU en anteriores ocasiones.

Foto: formulatv.com
La patochada del día: Imanol Griñán Alcántara
Recapitulemos. En episodios anteriores, Arenas había acusado a Griñán de estar instalado en el pasado y de no saber mirar al futuro. Como respuesta, en un mitin Griñán le dijo a Arenas que era un candidato del Cuéntame porque se había presentado a las elecciones con UCD, AP y el Partido Popular. Es decir, acusó a Javier Arenas de llevar toda la vida en política. Lo hizo Pepe Griñán, que fue viceconsejero de Trabajo de la Junta en 1982, viceconsejero de Salud de la Junta de 1986, Secretario General de Trabajo del Gobierno en 1987, ministro entre 1992 y 1996, diputado desde 1993 hasta 2004, diputado en el Parlamento andaluz desde 2004, consejero de la Junta desde ese año, vicepresidente de la Junta y, actualmente, presidente. Es decir, que Griñán acusa a otro de llevar toda la vida en política y él lleva desde 1982 sin bajarse del coche oficial. Por cierto, ¿haría la crítica delante de Guerra y Chaves?

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